La Gran Represalia Mántida
Resulta, que días atrás, habiendo cometido el error de depositar en mi billetera más dinero que el usual (andaba con diez pesos en vez de cinco) y de regreso a casa, caminando por la avenida, me ví tentado por un cartel que decía lo siguiente: “¼ kilo de helado: $1,50. Venta por mayor y menor”
Barato, sí. Lo suficiente como para que me den el helado más bromatológicamente peligroso jamás creado. Imaginé incluso hojitas de afeitar y jeringas usadas. El negocio (si es que así puede decírsele a un local de revoque fresco, iluminación menesterosa, olor a humedad y cortina de tiras plásticas) constaba de un sesentón despeinado y unos cuantos freezers haciendo las veces de mostrador. También había un diario y una silla. La escena era más triste que cualquier fragmento de “La Lista de Schindler”. Pero un cuarto kilo de helado a un peso cincuenta es decir: “barato”, sí.
El tipo abrió el freezer y antes de tomar un recipiente, preguntó: “¿dulce de leche y americana, chocolate y frutilla o chocolate y vainilla?” Me di cuenta entonces de que ya venían envasados y precintados. Recordé a Harrison Ford, de pie frente al precipicio. “Es un salto de fe”, me dije. “Será barato, salga pato o gallareta”. Pedí entonces el de americana y dulce de leche, pero apenas lo tuve en la mano supe donde estaba el tongo, porque el peso del pequeño envase de poliestireno expandido resultaba gracioso.
¡Epa, maestro! –le dije al estafador-. ¿Está seguro de que acá hay un cuarto?
-Así viene de la fábrica –fue su respuesta.
Resultaba obvio que allí no había 250 gramos ni por casualidad. Comparé mentalmente el peso del pote con el peso de las incontables porciones de ñoquis que tantas veces separé durante épocas pasadas (más gastronómicas) y calculé que allí no había más de180 grs., ni menos de 150grs. El precinto mismo decía (con ingenio) la capacidad del envase (aprox. 360 c.c.) en lugar del peso. Pero acostumbrado a pagar $4 los 250 grs., me decidí a llevarlo de todas maneras y probar la calidad, ya que seguía favoreciéndome matemáticamente. Se habrán dado cuenta ustedes de que para entonces ya estaba dispuesto a hacer casi cualquier cosa a fin de aprovechar la oferta.
-¿No tendrá una balancita? –pregunté haciéndome el tonto.
-Si no lo querés, no lo llevés –terminó diciéndome.
Ja. Y aunque debería de haberle dicho “metételo, forro”, opté por pagar y marcharme con el helado, lleno de curiosidad. Ya no quería el helado, sino ver lo que había dentro (léase aceptar la apuesta para ver las cartas del rival: “pago por ver”). Dos cuadras mas adelante, a la vuelta de casa, entré a una de las panaderías de las cuales soy cliente y tras saludar, pedí prestada una balanza que confesó exactamente 167 grs. Al llegar a mi hogar, le comenté el incidente a mi madre quien enseguida llamó a la comisaría, dispuesta a hablar con un tucumano amigo que allí tiene desde hace siglos. “Aprovechen. Manden un coche y van a ver que consiguen helado gratis” fue su último comentario. Ignoro lo que sucedió. Esa noche mi novia y yo disfrutamos del helado, que resultó particularmente agradable y liviano debido a la consistencia, ligera y aireada como ella sola. Una suerte de “merengue suizo de helado”, parecía. Muy rico.
Ahora bien, yo trato de ser bueno, pero cuando intento salir, ellos me arrastran hacia adentro nuevamente. No se que quiero decir con eso, pero aparece en “El Padrino”. Y como justiciero que soy, debo ejercer las leyes del equilibrio cósmico. Ya se la supe hacer a una panadera y ahora le toca al chanta éste. Aquí van las opciones, de la cuales una será llevada a cabo, dependiendo de vuestros votos. Considerando que a diario paso caminando frente al lugar, temprano, varias horas antes de su apertura, no tendré problemas en llevar a cabo cualquier acto vandálico antes de que el año termine. Va en serio la cosa.
a) Caca de perro. Poseo en casa suficiente vida perruna como para recoger 250 grs. de caca relativamente fresca. La idea es la de embarrarle toda la entrada y dejar la siguiente nota: “Esto es un cuarto de kilo, puto”
b) Cemento plástico. Alcanza con que prepare un poco de Poxipol y con la ayuda de un escarbadientes rellene todas las cerraduras. Me obligará a comprar Poxipol y tardar un buen rato (amén de cierto riesgo de ser detenido), pero a él le terminará saliendo mucho más caro y llevando todavía más rato. Ahí la gracia. Podría usar Poxiran a fin de ganar tiempo, pero no creo que resulte tan efectivo.
c) Fuego. Puedo llenar un globo con kerosene y aventárselo a la puerta. Luego, arrojar un bollo de papel envuelto en llamas y correr, total es de madrugada y rara vez hay alguien cerca. No, mejor no, a ver si un vecino sale lastimado. Esta no vale.
d) Nada, y que Dios se encargue. Hay quienes dicen que la mejor venganza es vivir feliz un millón de años, haciendo caso omiso a lo que se nos haya hecho. Pero eso es estúpido, porque nadie vive un millón de años. Esta tampoco vale.
e) Graffiti. Con aerosol, escribir algo así como “acá no entren a comprar sin balanza porque el cuarto de kilo pesa menos”. O “Acá atiende un policía ex-torturador, asesino, amigo de Etchecolatz”. También pense en "Usted, heladero, ha sido marcado por la revolución damospeniense. Tenga cuidado"
f) Caca, pero mía. Puedo llevarle el envase lleno de caca, embarrarle bien (cuidado y guante de goma mediante) toda la cerradura, la cadena y los candados de la persiana metálica y acompañar la obra de la siguiente nota: “¿Ves que no había un cuarto de kilo?”
Ahí tienen. Si no votan, al menos tienen ejemplos de vandalismo básico para llevar a cabo.
UH, soy el primero, ummm, yo optaria por cargarme una balancita, y decirle algo así como un cuarto 1.50, tonce un kilo 6 pesos. poneme un kilo de helado en la balancita y me voy piola.(serían 8 o 9 potes).
Ahora si esto no vale, opto por la ultima.
Saludos
parece que el resultado va a ser escatológico nomás.
Yo voté por la del pegamento.
La de la cacona suena asquerosito y no está a su altura.
No no no.
Nada de andar ensuciándose por ese chantún.
Además, el hacerle sonar las cerraduras va a ser mucho más oneroso.
Lo quiero porque es malo.
Malo y creativo.
>=)
mantis, solicito expreso pedido y aviso de que lo voy a linkear.
Usted es de lo mejor de la blogósfera(por lo menos de lo que yo veo).
Saludos!
ergovcm????
¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO! ¡PE-GA-MENTO!
¡Cómo grita la tribunaaaaa!
(si la habremos hecho en la escuela, esa)
El turi: Linkee, que es gratis, Adopte una mantis y sea feliz.
Deapoco: Si, pero yo voté por la del pegamento. Porque a todos les duele siempre más en el bolsillo. Aunque la caca es la caca.
Cruella: Si, cuando me pongo malo me acuerdo de usted... besos.
Deg: No señor. Al colegio se va a estudiar. Con lo legado por Sarmiento no se jode.
Yo acuerdo en los objetivos, pero no en los métodos. ¿Para qué va a molestarse en cagar en un envase pudiendo cagarle en la propia puerta?
La impunidad está garantizada, compañero. Si alguien lo vé o lo denuncia, Ud. pone cara de circunstancia y dice: -No aguanté. Soy enfermo. Tengo colon irritable.
Aunque pensándolo bien, una buena alternativa mixta sería embadurnarle el candado con un sorullo, cuidando de tapar el agujerito por donde entra la llave. No gasta en pegamento y no habrá cerrajero que se atreva a ese candado, no porque no pueda, sino porque no quiera.
Piénselo, compañero, piénselo...
El comentario de Amperio, fue sublime.
Yo voté por su materia fecal, Mantis.
Saludos y mucha mierda con la vendetta
voté por el graffiti:
es barato, lo va a ver todo el barrio y nadiesssss le va a comprar, el tipo se va a llevar una calentura de aquellas y va a tener que gastar en pintura para tapar el aerosol (que sea negro si la pared tiene tonalidad clara) y usted, estimado no va a correr ningún riesgo si lo hace de madrugada.. quien no ha pintado paredes en la noche (¿¿¿??)
Cuidese.. no vaya a ser que vaya en cana por hacer un obra de bien al pueblo!
yo propongo una solucion integral, selle la cerradura con caca de perro y de Mantis y de paso con el mismo material haga la pintada. Es lo mas barato, digo. Y nuclea todas las opciones
Amperio: Eso ya es mucho, compañero. Las nalgas al aire y la vergüenza son todo uno. Igual... lo pienso, lo pienso...
Pesimista: El suyo fue un voto de mierda, señor. La mía.
Araña: Yo nunca pinte paredes, ni durante la noche ni durante el dia. Aunque más barato que mi propio pupú, el aerosol, no es. En serio.
Yerbanohay: Creo que todos sabemos que eso va a terminar enchastrándome más a mí que al boliche en cuestión...
Cuando yo era chica (bromas acerca de la era del hielo aparte), hubo un caso famoso en el que un tipo le compró a una conocida marca de fósforos yanki de aquel entonces, algo así como cinco mil cajitas y, escribano público, abogados y testigos mediante, se dedicó a contar cada fosforito descubriendo que faltaban como dos o tres por caja. Obviamente, viviendo en EEUU, todos sabemos que ganó el juicio por estafa de antemano.
Acá quizás podría dedicarse a destapar el asunto "mafia de los helados" y terminar siendo un afamado periodista con futuro a gran político gran, o sea: a ser millonario.
Por supuesto en el camino se encontraría con la probabilidad de convertirse en una especie de Cabezas de los kioskos de helado, pero si sortea este punto, se hace rico nomás.
Piénselo.
yo haría la de perro pero con una especificacion: con la mano enguantada y bien cargada, embadurnaríale la vidriera formando un rectangulo no menor a 50x70 cm dejando una fina pelicula de heces. una vez hecho esto tomaría una ramita o lo que me gustase servirme y grabaría la leyenda "esto es 1/4 de kilo, puto".
Le mejor es la de la caca de perro, pero me parece que sería medio fea de llevar a cabo.. El graffiti tiene su carisma y me parece menos feo de hacer.
fuhomms
Yo voté por la caca de perro, porque considero que anular cerraduras se reserva para los vecinos que hacen temblar las paredes con el volumen de la música o dejan tirados los puchos por los pasillos del edificio. Aunque después de la sugerencia de su madre al señor de la gorra, está seguro de que queda aún el negocio en pie?
No sé cuánto más voy a seguir riéndome con el comentario de "El Idiota"...
yo diria la caca de mantis, tiene q ser una venganza personal o no?
ademas demuestra lo artesanal contra lo industrial
otra opcion podria ser la bola en la ingle
El idiota: Si, pero que se sume Payín también, que es musculoso.
Me hizo usted sentir Tyler Durden (Proyecto Mayhem). Me gustó, me gustó un montón. Pero a Freddo, no, porque vende caro.
Sta. Cosmo: No, no, ese es el problema de mucha gente: QUE LE ESCUPE EL ASADO A LOS PODEROSOS Y TERMINA LIGÁNDOLA ENTERITA. LEA LO DE HOY Y VA A VER.
Chamemal: Bueno, para eso también le hago un poco de tarjetería española con caca... usted pide demasiado...
Carolina: Algo me decía que usted iba a escoger la del graffiti. Debo estar conociéndola mucho, ya.
Eli: Los vecinos, agradecidos. Y si, el negocio sigue en pie, todos los días paso frente a él y me regocijo de antemano.
Payin: No, muy larga la frase, amigo. Con un cuarto kilo, no me alcanzaría. No hay tanto popó. Tendría que diluirla o hacer un chiquero, comiendo remolachas y aceite antes, que se yooo... deje nomás.
Pesimista: Usted siempre tomándose todo para la joda. Por eso le va como le va...
Neosatan: La bola en la ingle, no.... no se ha ganado semejante privilegio/homenaje simpsoniano.
Si bien ya voté y me amparo en la constitución para no revelar qué opción elegí, le hago algunas sugerencias. Primero, debería haber una opción que incluya a TODAS que es lo que yo hubiera votado. Segundo, ¿Para qué usar Poxipol si la Poxilina es más práctica y seca más rápido? Tercero, si al hombre se le dá por pesar y/o analizar su excremento puede alegar usted no comió lo suficiente o que no corresponda a su producto, lo que lo llevaría a un pleito y a seguir comiendo helado y defecando para que no le pase lo de los fósforos. Por último la de la caca de perro quedaría más hollywoodense si la pone en una bolsa de papel, a la que prende fuego, luego toca timbre y cuando la víctima salga e intente apagar la misma con los pies enpantuflados, con la inevitable consecuencia de enchastrarse todo, ahi se le planta delante y le dice: ¿Vés? Eso es un cuarto. Eso si después corra bien rápido.
(Cabe aclarar que la última sugerencia es un cliché de películas boreales de estudiantes universitarios).
y digo yo, que le parece el polonio en un regalito sorpresa de navidad?
Ahora me siento no sólo aburrida porque elegí el graffiti, si no que encima me siento predecible! Me voy a llorar al rincón, chau.
wwhoa
Eso ya es una exclamación así que no hace falta transformarlo en frase
Pitoti2: Pero es que el negocio abre a las nueve, y yo paso a eso de las seis y media... le tengo que poner un mechero de queroseno, si quiero que aguante ardiendo tanto rato...
Malena: No, porque le desconfiaría y hasta podría reutilizarlo.
Carolina: No, no llore, que las chicas lindas son más lindas cuando se ríen. Beso.
Saludos a todos.